En este hotel decidieron celebrar su ceremonia civil y banquete Yor y Manuel. Fué una boda de ensueño, llena de contrastes, original y divertida. A continuación, un resumen de su gran día.
La novia.
Yor es una chica de esas que te contagian el buen rollo. Atenta y simpática, con la sonrisa puesta además de su precioso vestido de novia. Se vistió en la habitación destinada para su boda en el hotel La Plantación.
Con su fiel compañero y su tía disfrutamos de esos momentos previos a la ceremonia, ¡qué privilegio poder compartirlos con ella!.
El novio.
Mientras tanto, apenas unas habitaciones más allá, se vestía el novio. Manuel y su familia se divirtieron en su sesión, porque no todo tiene que ser protocolario, nos encanta que seáis vosotros mismos, que disfrutéis el momento y si os apetece «gamberrear», que lo hagáis con total libertad.
Si tenéis mascota, sabréis que son un miembro más de la familia, por eso M & Y tenían claro que compartirían el día de su boda con sus peludos.
Ceremonia civil en el hotel La Plantación de Finestrat.
¡Qué momentos más bonitos vivimos durante la ceremonia civil!. Un poco nerviosos pero muy ilusionados recorrían nuestros chicos el camino hacia donde se oficiaba la ceremonia.
Todo estaba perfecto y familiares y amigos fueron testigos de su enlace. Para ser sinceros, tenemos que reconocer que hubo momentos en los que nos emocionamos. Gestos, palabras, detalles, miradas…¡estos chicos son lo más!.
El cocktail de boda al aire libre.
A comenzar el cocktail de boda en el hotel La Plantación de Finestratat, aprovechamos para realizar una sesión de pareja por las instalaciones. Nos gusta buscar esos momentos a solas con vosotros para realizar fotografías de boda más personales e íntimas.
Los invitados disfrutaron de un cocktail amenizado con bailes tradicionales búlgaros, del país de origen de Yor.
Banquete de boda en el hotel La Plantación de Finestrat.
La entrada al banquete con fuegos artificiales, baile y risas, ¡muchas risas!. Y como colofón…el baile nupcial, donde «nuestros chicos» exivieron pasos de baile.
FELICES. Así vimos en todo momento a nuestros novios y así nos hicieron sentir a nosotros. Porque la felicidad, es contagiosa, y así les deseamos que sigan durante el resto de sus vidas.
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